Pulpo de San Antón: Pulpo de pequeño tamaño, de un kilo y medio aproximadamente, que se cocina utilizando tres planchas. En la primera plancha se le quita el agua; en la segunda con el fuego más vivo se le deja bien dorado; y en la tercera se mantiene templado hasta el momento de servirlo aliñado con una mezcla de aceite, vinagre, pimienta y limón adaptada según el estilo de cada establecimiento. En estas fechas el pulpo llega procedente de otros puertos para satisfacer la alta demanda que llega habitualmente a los cinco mil kilos.
Rollico de San Antón: Dulce típico que encontramos en las panaderías y hornos del barrio. En la parroquia se venden los benditos y la tradición manda a las mujeres solteras robar uno en un descuido para encontrar novio. Si el hurto ocurre el día grande de la fiesta, el efecto es mucho más efectivo.
Enlace: Noticia en La Verdad
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